Durante el paso de las celebrities por la alfombra roja de los Oscars se produjo un tenso momento, el reencuentro de Sacha Baron Cohen con el periodista Ryan Seacrest. Recordemos el ‘incidente’ que tuvo lugar hace 4 años en ese mismo lugar, cuando le volcó encima las cenizas del difunto y amado líder norcoreano Kim Jong-il.Para ponernos en situación hay que retroceder a 2012. Sacha Baron Cohen estaba en plena promoción de su película ‘El Dictador’ y acudió a los Oscars metido en su papel. Llevó las cenizas de su amigo fallecido meses antes, Kim Jong-il, con un plan maléfico que no le iba a hacer ni pizca de gracia al presentador:
Este fin de semana, cuatro años después, el periodista se encontraba de nuevo en la alfombra roja de los Oscars y al aparecer Sacha Baron junto a su esposa en la zona de entrevistas se negó a dirigirse a ellos. Les ignoró por completo.
Sin embargo Sacha espero el momento justo, una conexión en directo mientras entrevistaba a Lady Gaga para aparecer por sorpresa y saludar a su ‘amigo’ Ryan Seacrest. La tensión se palpaba:
*(sólo aparece al principio del vídeo)A pesar de todo, los Oscars le hicieron un hueco para presentar a uno de los premiados y apareció interpretando al gran Ali G, con un discurso sobre la gente negra ‘cómo él’. RESTECP!
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